
"En el último año y medio, el sistema portuario italiano ha
víctima de una parálisis administrativa que pone en grave riesgo la
Eficiencia y capacidad para enfrentar los crecientes desafíos
del sector logístico y comercial. A pesar de la repetida
Declaraciones de buenas intenciones del Gobierno y el compromiso
expresado por el Parlamento, los hechos muestran una persistente
Incapacidad para tomar decisiones: durante meses, los nombramientos de presidentes
de las Autoridades del Sistema Portuario permanecen bloqueadas en el
comisiones parlamentarias, dejando efectivamente la gestión en manos de
de comisionados nombrados por el Ministerio de Infraestructura y
Transporte. Así lo denuncian las asociaciones de transitarios,
agentes marítimos y funcionarios de aduanas del puerto de La Spezia
precisando que "esta situación, aunque no paraliza
formalmente el funcionamiento de las autoridades, representa
un fuerte freno a los principios de participación, transparencia y
control previsto por la legislación vigente".
"La reforma de la gobernanza portuaria, introducida por la
Decreto Legislativo N° 169 de 2016 e integrado parcialmente en el
Ley 84/94 - recuerda una nota Representantes de los operadores de la
puerto de La Spezia firmado por el secretario general Salvatore Avena -
había marcado un punto de inflexión al establecer herramientas fundamentales como la
Mesa de Socios y el Comité de Gestión, diseñados para
garantía: la primera una amplia representación para compartir el
decisiones estratégicas el segundo para llevar a cabo las actividades
control pero sobre todo votación sobre el documento de planificación
Estrategia del sistema. Hoy, sin embargo, la falta de una decisión
una política clara y eficaz ha generado un verdadero "vacío"
normativo". Aunque actúan de manera responsable,
Los comisionados operan sin el apoyo de los organismos colegiados
establecido por la ley, privando así a la comunidad
puerto y el territorio de la posibilidad de un enfrentamiento
entre los principales actores del sector y las Autoridades
del Sistema Portuario. La gestión es correcta de las manos
del Comisario, aunque todavía no es posible convocar la
órganos representativos, que no pueden establecerse debido a
de la persistente falta de iniciativa institucional y política".
"Este preocupante estancamiento - continúa la nota -
Sumado al hecho de que, desde hace años, el gobierno ha estado anunciando una reforma
de los puertos italianos que, sin embargo, nunca se materializa.
Estas promesas, sistemáticamente renovadas y nunca cumplidas,
acentúan aún más la sensación de incertidumbre y la percepción de
inmovilidad que aquejan al sector, frenando el desarrollo de la
Sistema Portuario Nacional. El gobierno y el Parlamento, incapaces de
Proceda rápidamente con las citas, abandone el sector estratégico
del puerto "navegando a la vista", sin un
Una brújula compartida sin una ruta definida. Es un
que corre el riesgo de comprometer la competitividad de la
país y la capacidad de innovar y crecer en los mercados
internacionales".
"En una situación tan grave y surrealista - concluye el
Nota: ya no basta con apelar a lo habitual
Responsabilidades institucionales: se necesita una verdadera sacudida de buena suerte
sentido, ese sentido de las instituciones que ahora parece perdido y que
deben volver a guiar las opciones políticas, más allá de cualquier
interés partidista. El gobierno y el Parlamento deben sacudir
de la inmovilidad, encontrar el coraje para regresar por completo
centralidad en los órganos colegiados, reactivando aquellos
mecanismos de comparación, reparto y control que la ley
y que son esenciales para proteger los intereses generales de la
de la nación. Solo con un cambio decisivo de rumbo, los puertos podrán
ser concretamente el motor del desarrollo, la innovación y la
competitividad que el país merece con una visión compartida y
reconocido".